jueves, 15 de noviembre de 2018

Afán posesorio

Amar no es poseer
Amarrar ni retener
Amar es liberar
Sin miedo a perder

Amar es preguntar
Antes de coger
Amar es soltar
Sabiendo que va a volver

Amar es no tener
Afán posesorio
Es no pretender
De ti un accesorio

El otro día hablando con una amiga, me hizo ella la siguiente pregunta en relación al tema sobre el que estábamos hablando: "¿Por qué este afán posesorio?" En las relaciones de pareja...

Yo puedo poseer por ejemplo un bolígrafo: el bolígrafo como ser inanimado y sin voluntad que es, está bajo mi total control: yo lo poseo. Si me da la gana ponerlo encima de la mesa, lo hago, si quiero prestarlo, lo hago...el boli va a hacer lo que yo quiera, que para eso es mio, y hasta que deje de escribir, lo será, y ese día lo tiraré a la basura.

Pero las parejas no son cosas, no se pueden poseer. Las relaciones humanas son mucho más complicadas; por mucho que te pongas a vivir en pareja o que incluso te cases, tu novio/novia, esposo/esposa, nunca va a ser tuy@. Ellos son de sí mismos. Como con el boli, yo no puedo decidir por mi pareja dónde se va a sentar, con quién se va a relacionar, o lo qué debe pensar, por ejemplo. Es que el boli no tiene capacidad de pensar, pero las personas sí. 

Esto es lo que mucha gente no entiende. Que sus parejas no son posesiones, y que si quieres a alguien de verdad no lo controlas porque quieres que sea feliz, y su felicidad pasa necesariamente por ser libre e independiente. No llamo libertad e independencia a que te falte completamente el respeto y a que se pase el compromiso que tenéis por el arco del triunfo. Eso no... Ese es otro tema... Yo hablo aquí de que tu pareja, por serlo, no pasa a ser algo tuyo. Me explico. Últimamente estoy notando en los adolescentes que me cuentan "tengo novio/a" de la misma forma que me comentan que se compraron unos tenis Nike. La pareja, como los tenis, es un artículo de moda, un accesorio, algo que se tiene que tener para ser guay. Eso es muy peligroso. Las personas NO se poseen. Las personas no son cosas.
Hasta donde yo sé, y sé poco, una relación es una unión de dos personas que se quieren, se llevan bien y se complementan juntos, pero no por eso dejan de ser ellos mismos. Además, a mí no me interesa que me ame un muñeco sin voluntad que vive, respira y piensa a través de mi; quiero a una persona que, aún siendo libre para elegir otras cosas decida permanecer conmigo, porque así lo desea, y no porque como el boli, se sienta obligado a hacerlo.
En la foto Céline Dion y René Angelil