Estimada decepción;
Odio el sentimiento que generas,
ese que se aferra al alma
cuando un nuevo fracaso
se confirma doloroso.
Quisiera que te fueras
oh, decepción cruel
con el sentimiento aquel
y casi nunca volvieras.
Tu cicatriz me enseña,
y tambien me hiere,
que no debe ilusionarnos
cuando de afecto no hay seña.
Gracias decepción